Caperucita se come al lobo de Pilar Quintana
Ocho cuentos que dejan intranquilo a uno. Caperucita se come al lobo (La Travesía Editora, 2021) de Pilar Quintana —ganadora del Premio Alfaguara (2021)— reúne unas historias cortas que estremecen e inquietan por los giros inesperados de la trama, una narrativa cautivadora y personajes que nos cuentan su propia realidad en un mundo lleno de violencia, pasiones y reglas para ser transgredidas. Los protagonistas de estos cuentos quieren ser escuchados porque ya no tienen nada que perder o no importa nada.
En este libro de cuentos, la escritora colombiana conduce al lector a imaginarse el miedo, el goce y hasta la solidez de los cuerpos de sus protagonistas que en varias ocasiones son víctimas, pero también victimarios y culpables de sus impulsos sin medir las fatales consecuencias de las pasiones. Los ocho cuentos nos aproximan a una sensorialidad donde los cuerpos, libres o no, son sometidos por otro con más poder o, de manera sobrenatural, experimentan transformaciones que nos llevan a una dimensión alterna. Los cuentos “Olor” y “Amiguísimos” transmiten, con unas precisas escenas eróticas, esa sensorialidad de los cuerpos en el sexo donde los personajes se exploran mutuamente y se centran en alguna parte del ser van alimentando una memoria carnal. En los relatos “El hueco”, “Violación” y “Una segunda oportunidad” la violencia se manifiesta y perturba por las agresiones sexuales, golpes y torturas que sufren los protagonistas no solo por los victimarios, sino por el machismo en una sociedad donde sobrevive quien que puede. En “Caperucita se come al lobo”—el cuento mejor logrado y con el giro narrativo inquietante—y en “El estigma de Yosef”, la autora juega con el título del popular cuento infantil (y que este no tiene nada de infantil) y la historia bíblica en Belén para atraer el lector a encontrarse con estas dos historias distintas. Finalmente, el cuento “Hacia el infinito” es una narración que ronda a la ciencia ficción donde el espacio y tiempo es inestable, raro y relativo (así como en “Una segunda oportunidad”) y los cuerpos se entremezclan entre dimensiones paralelas; sin embargo, la esencia del amor y de la soledad trasciende.
Aunque cada cuento tiene una particularidad, todos los personajes están constantemente vigilados. Siempre alguien o algo los observa y, así, se visibilizan los prejuicios, las soledades, las miserias, las angustias y los deseos de los seres humanos. La exploración de los cuerpos femeninos y el erotismo revelan las luchas y dudas de las protagonistas sobre los, aún tabúes del sexo y las prácticas puritanas y conservadoras la sociedad. El hecho de que las mujeres pueden ser juzgadas, para bien o para mal por sus acciones, aparecen entre líneas y nos encontramos con la ya conocida dicotomía: mujer santa, mujer puta. La autora nos invita a entrever el machismo como un mal social que encadena a las mujeres a la agonía y que hiere a la misma sociedad. Se encuentran en una prisión invisible de la cual queda huir. En estos cuentos muy recomendables, por poder sentir la libertad, vale la pena saltar al vacío, aunque sea por un momento.
Quintana, Pilar. Caperucita se come al lobo. La Travesía Editora, 2021.
Pilar Quintana es autora de cinco novelas y un libro de cuentos, Caperucita se come al lobo. Fue parte de la selección del Bogotá39 en 2007. Recibió en España el Premio de Novela La Mar de Letras por Coleccionistas de polvos raros. Participó en el International Writing Program de la Universidad de Iowa como escritora residente y en el Internacional Writers Workshop de la Universidad Bautista de Hong Kong como escritora visitante. Con su novela La perra, traducida a quince lenguas, fue finalista del Premio Nacional de Novela y del National Book Award y ganó el Premio Biblioteca de Narrativa Colombiana y un PEN Translate Award. Con su más reciente trabajo, Los abismos, ganó el Premio Alfaguara de Novela.